Su primer semana

A medida que se va tranquilizando la cosa puedo retomar la escritura. En este momento está Andy en casa (quien capturó el video de las valizas), lo cual me permite sentarme un rato en la computadora y tratar de ponerme al día con algunas cosas. En realidad no estoy muy al día ya que acabo de enterarme que el Papa está en EEUU... pidiendo por la paz!, en fin.

La primer semana de Josfina fué muy variada. La primer noche fué un calvario. Recordemos que ella nació a las 20:11 y que a las 22:00 (mas o menos) estaba lleno de gente que vino a conocerla. Así estuvo la habitación hasta cerca de las 0:00 hs del Martes, cuando quedamos solos los tres.

Ahí estuvimos rato para hacerla dormir, darle teta, en fin. Creo que la vez que dormimos mas estuvimos una hora acostados. Por suerte el tete nos dio un rato mas, ya que le encantó.

Pero afortunadamente esta escena no se repitió todas las noches, y a la noche siguiente durmió bárbaro (y nosotros también).

Después tuve el gran desafío de la cambiada de pañales, recordemos que soy (o era) bastante esquerocito al respecto. Pero la verdad que me fué bárbaro. Hasta metí un dedazo al pañal a ver si había postre, y había. Y no me dió asco ni nada. Se vé que internamente hay algo que le cambia a uno y le saca esos ascos, por lo menos por la caca de un hijo, no creo que aguante lo mismo de otro gurí.

La semana fué transcurriendo bien entre meconio y teta light, y digo light porque al principio tomaba bastante poco. Pero al tercer o cuarto día le atacó el hambre. Largó todo el meconio y ahí si empezó a pedir y pedir teta. Esta petición siguió en aumento hasta anoche (punto cúlmine del hambre) donde estuvo alrededor de 4 horas entre teta y teta y eructo, pero no se llenaba.

Ya desesperados llamamos al neonatólogo que nos dijo que el problema podía tener dos causas. 1) O bien no se llenaba porque salía poco o lo que fuera que hiciera que Josefina siguiera con hambre o 2) está de mañosa y en realidad lo que quiere es dormirse en la teta. Para resolver el enigma, el doctor nos dijo que compraramos un suplemento alimenticio y se lo diéramos después de 20 minutos de teta. Si se prendía y se lo tomaba era hambre, si no lo quería, era maña.

Locos de la vida por la solución propuesta salí en busca de una farmacia. Compré la fórmula y se la preparamos. Josefina se tomó 2 memas llenas del complemento (después de las 4 horas de teta). Lo que indica que tenía un hambre bárbaro y que es un barril sin fondo, porque según las instrucciones de la lata, un niño de 1 mes se toma dos memas :)

En fin, ahora estamos en esa... teta y complemento, hasta por lo menos el Viernes que tenemos consulta con el neonatólogo.

Dejo una foto de anoche donde se terminó durmiendo después del complemento.