martes, 24 de noviembre de 2009

Las catástrofes aereas

Por alguna razón (morbo?) me gusta mirar los programas de catástrofes aereas. Me interesa el tema de la aviación en general, pero las caidas de aviones en particular siempre tienen algo en común, y es que fallaron varias cosas. No basta un solo fallo o error para que ocurra una sino que es la suma de varios de estos que genera la caida.

Y exactamente eso fué lo que pasó hoy… a no alarmarse, estamos todo bien, pero tuve mi primer (por lo menos no me acuerdo de otra tan grande) animalada hoy.

Vivi se había ido a lo de una compañera a estudiar bien temprano, por lo que yo iba a llevar a Jose al jardín (1). Como yo tenía que dar varias vueltas en la mañana y en la tarde hoy no iba a ir a trabajar (2) por lo que decidí llevarla en auto y así volver mas rápido para poder aprovechar desde casa.

Bajamos con Jose a la cochera y como no iba a trabajar yo no llevba mochila por lo que llevaba todo en la mano (3). Abrí la puerta del auto, dejé todo adentro para liberarme las manos (4), subí a Jose a la sillita del auto, bajé el botón de la tranca de la puerta y cerré! Doy la vuelta al auto para subirme yo y al darme cuenta que no tengo las llaves, me palpo los bolsillos esperando un milagro, pues había dejado las llaves adentro del auto, junto con las de casa. En el apto tengo una llave de repuesto del auto, pero tampoco tenía como entrar al apto.

De inmediato llamé a Vivi, había dejado el celular en casa (5). Fuí corriendo hasta el taller de al lado a ver si tenían una llave que me puediera servir. Justo estaban arreglando un Fiat Uno (igual al mio) y probamos con esa llave. Nada, no abrió. Josefina a todo esto estaba muy tranquila, jugando con los 34 chiches que tiene adentro del auto (punto para mi). Llamé a una de mis cuñadas a ver si podía venir a cuidar a Jose mientras yo salía a buscar a Vivi. Vivi estaba cerca, no sabía bien donde pero ya la había llevado una vez y tenía fé en reconocer la casa cuando la viera. A quien llamé (Andrea) estaba trabajando y muuy lejos como para venirse en un tiempo razonable, llamé a otra (Alejandra) que por suerte estaba mas cerca y en auto por lo que en menos de 5’ (no se exactamente cuando porque el tiempo para mi pasaba a otra velocidad) ya estaba ahí.

Me dió la llave de su camioneta y me fuí en busca de Vivi, mientras ella se quedó cantándole a Jose desde afuera y jugando al clásico “está, no está”.

Recorrí la zona sin poder localizar la casa. Pregunté en el barrio, no podía estar muy lejos, pero nada. Llamé a Alejandra a ver como estaba Jose y me dijo que seguía bien, tranquila, por lo que decidí volver a intentar y dar alguna vuelta mas. Cuando a los pocos minutos de cortar me llama Ale diciéndome que ella tenía una llave de nuestro apto. que la llave de afuera no servía pero tenía otra, que podía ser la de la puerta del apto.

Volé de vuelta hasta la cochera, agarré la llave, subí al apto y probé con la otra llave. Me sentía en “Felíz Domingo” intentando abrir el cofre de la felicidad cuando que noto que… “si! está girando!”… la llave era la del apartamento, agarré la llave extra del auto, bajé y sauqé a Jose del auto :) uf! todavía me acuerdo y me canso.

En fin, como habrán visto se dieron varios sucesos que hicieron que Jose estuviera cerca de 40 minutos sola en la sillita. Ella por suerte no se dió cuenta de los nervios, ni nada, cuando abrí la puerta del auto le hice la misma fiestra de siempre… “bieeen, llegamoos!” aunque ella no entendió mucho.

Asique este post es un simple homenaje a mi cuñada, que en algún momento dudé si sería buena idea darle una llave y hoy me quedé mas contento que nunca de que la tuviera :)

PB220040

(hace muy buenas picadas también)

lunes, 9 de noviembre de 2009

El misterio de las papas chips

Lays

Esta imagen la puedo poner acá porque Josefina aún no se conecta a internet, y sobre todo porque cuando Vivi se conecta a leer Jose está casi siempre dormida o por lo menos jugando en otra pieza.

Lo cierto es que hay pocas cosas que enloquezcan a Josefinas tanto como el paquete de papas que se ve en la imagen. Es realmente increible la reacción que causan en ella… las come con ganas pero lo increible es como se pone cuando ve un paquete. Parece una cocainómana en abstinencia.

Tal es así que un día vió una bolsa de estas cuando venían del jardín con Vivi y se pasó tooodo el camino llorando porque se le antojó una papa.

Tal es el enojo que le produce no poder tenerlas que cuando vamos a hacer las compras tenemos cuidado por donde vamos en con el carro y evitamos toda bolsa similar a estas. Solo por las dudas porque en realidad ella nunca se confunda, sabe bien cual es la bolsa que le gusta,

Y no solo cuando vé el paquete. Actualmente existe una promoción de las papas en cuestión y de Pepsi por lo que en las paradas de ómnibus se ven carteles similares a la imagen de abajo.

EuniceKesman

Pues cuando vé esos carteles también se pone a llorar porque quiere papas.

Lo único que espero es que esto se le pase y no cree en ella un reflejo condicionado de admiración hacia Eunice Castro o Alberto “Rambullé” Kesman.

martes, 3 de noviembre de 2009

Las gracias

No se han cruzado en la vida, con esos padres que siempre les quieren mostrar gracias de sus hijos? Y que, obviamente, estos no hacen nada de lo fabuloso que dicen los padres que hacen?

Esto es en lo que nos hemos convertido con Vivi. Jose está en un punto en el que repite todo, absolutamente todo, pero en su dialecto obviamente lo cual lo hace mas gracioso. Realmente nosotros nos matamos de la risa cuando la escuchamos a ella repetir algo de lo que hablamos nosotros… ella anda por ahí jugando (aparentemente concentrada en lo suyo) y de repente dice algo de la conversación nuestra. Eso es siempre muy gracioso, y por eso es que le pedimos que lo repita, para mostrarle al resto lo gracioso que es.

Pero claro, ella no lo hace para parecer graciosa por lo que casi nunca repite lo que le pedimos y nos termina dejando como unos boludos.

Eso es CASI siempre, ya que como se verá a continuación, la atrapamos en cámara diciendo “fantástico”.

 

Y sé que suena mas raro (agrandado) aún, pero el fin de semana pasado Josefina subió las escaleras de la casa de mis padres contando hasta 6… y de ahí pasó al 8, después al 12, etc. Pero del 1 al 6 contó perfecto. De esto último no tengo videos pero por suerte los abuelos la escucharon, tengo testigos! :)